6.20.2012


Me prometí no volver a caer.
Caí tan profundo que veo el fin del mundo.
En el horizonte todo se termina. Las hojas se queman, las flores se marchitan, las nubes de esfuman, el sol se apaga, la vida muere.
Pude ver el fin del mundo. El limite. La belleza de sus colores no van a lograr engañarme. Mis ojos mentirosos. Ya no confío en ellos. Y si no  confío en ellos no confío en mi. Ya no confío en los otros, en la tierra, en las flores, en los cuerpos, en las miradas, en las palabras, en las promesas y ni siquiera en mis ojos.
Los senderos se bifurcan, y ya no veo hacia donde me llevan. Las raíces se comen el camino. Todo es difuso, porque no creo en mis ojos.
Todo es difuso, incluso las palabras no dichas.